Hace unas semanas, publiqué en mi cuenta de Instagram una publicación explicando qué era la filosofía Kaizen y cómo te puede ayudar esta filosofía si estás emprendiendo en tu propio negocio a la par que continúas trabajando por cuenta ajena.
Fue tal la aceptación que tuvo este post de Instagram que, tras realizar una pequeña encuesta, un rotundo 100% me animó a profundizar más acerca de este tema.
Así que no te hago esperar más. Aquí te dejo con este artículo donde profundizaremos más sobre esta filosofía así como aprender a aplicarla en nuestro día a día.
Antes de entrar en materia, quiero ponerte en antecedentes. Mis propios antecedentes.
Cuando decidí emprender, sabía que esto no iba a ser fácil debido a que yo aún trabajaba por cuenta ajena. A día de hoy, continúo trabajando por cuenta ajena.
Iba a necesitar de muchas dosis de planificación, disciplina y sacrificio para poder compaginar mí día a día como empleada y cómo emprendedora.
Cuando estaba a punto de lanzar Estudio Know Tech al mundo digital, me ofrecieron la oportunidad de hacer un Máster en Tecnología y Arquitectura Big Data. ¡Me interesaba muchísimo el tema además de que era una grandísima oportunidad!
Por lo que a la ecuación le tuve que sumar el tiempo de clases y estudio que me iba a conllevar el máster.
Aún así, decidí lanzarme al mundo de Internet con el Estudio.
Desde entonces, mi vida a girado en torno a:
Te podrás imaginar como es una semana en mi agenda, compaginando tareas de estos cuatro grandes puntos….
Y en medio de esta amalgama de tareas planificadas, disciplina y mucho amor propio para poder llegar a todo, descubrí la Filosofía Kaizen.
Kaizen es un término que proviene de la cultura japonesa y significa mejora continua.
En el sentido más estricto del término, Kaizen es una estrategia de calidad de grandes empresas multinacionales y se asocia a la forma de trabajar de ciertos sistemas de producción industrial, tanto orientales como occidentales. Es decir, al hecho de que cada día debe contener la posibilidad de una mejora, por pequeña que sea.
Sin embargo, no hace falta pertenecer a una gran empresa para comenzar a aplicar la filosofía Kaizen y aprovecharnos de sus numerosos beneficios.
¿No te ha pasado alguna vez que has querido hacer un gran cambio en tu vida y que, a los pocos días, has tenido un pequeño fallo o desajuste que te ha hecho que te desmotivaras? Pongamos un ejemplo sencillo para entenderlo: el gran cambio que quieres hacer en tu vida es comenzar a hacer deporte. Si comienzas queriendo ir los 7 días al gimnasio, llegará un momento que falles un día y ello te lleve a desmotivarte. Comienza saliendo a andar un día si y otro no, luego comienza por salir a andar todos los días, incorpora luego algún día de gimnasio… poco a poco…
El principio básico es que una serie de mejoras continuas y pequeñas son mucho más efectivas que un solo cambio grande.
Normalmente tenemos miedo a los cambios grandes, pero una serie de cambios pequeños y constantes pueden generar mucho impacto al convertirse en hábitos.
Si aún estás trabajando por cuenta ajena pero, como en mi caso, te has animado a emprender, aplicar los principios de la filosofía Kaizen te puede hacer ver tu día de una manera totalmente diferente.
Veamos a continuación de qué manera me ha ayudado a mi estos últimos meses y de qué manera te puede ayudar a ti si te encuentras en una situación similar.
Estás trabajando por cuenta ajena y aún así te has lanzado a la aventura de emprender online.
Cuando arrancas tu propio proyecto online bajo esta premisas, tienes que ser muy consciente de que arrancar tu emprendimiento te va a llevar más tiempo que otras personas que se pueden dedicar al 100% a su propio negocio.
Tienes que dividir tu tiempo entre tu trabajo como empleada y tu trabajo como emprendedora. Solo por esto debes entender que tus ritmos van a ser diferentes a otros emprendedores.
Cada una de nosotros tenemos nuestras propias circunstancias y nuestros propios tiempos y no podemos compararnos con otra emprendedora o emprendedor que pueda dedicarse al 100% a su proyecto.
Ser consciente de esto va a ayudarte a que no te frustres en el camino.
Debido al punto anterior, tu tiempo es oro y es necesario que lo aproveches al máximo.
Tener unos objetivos bien definidos te va a ayudar a poner foco en las tareas verdaderamente importantes.
Define objetivos SMART que marquen el rumbo de todas las tareas que tienes que abordar.
Si tienes la suerte de poder delegar tareas en otra persona, intenta delegar esas tareas mecánicas y superfluas con las que no obtienes un beneficio directo. Tu no puedes invertir tu tiempo en este tipo de tareas. El 100% de tus esfuerzos durante este periodo debe de estar en las tareas que te llevan hasta tus objetivos.
Da igual si son dos horas al día o apenas 30 minutos en un trayecto en transporte público. Cada día tienes que dedicarle un rato a tu proyecto digital.
Hay muchas formas de dedicarle apenas 30 minutos a tu proyecto:
Dedica este rato a avanzar en los objetivos que tienes definidos. Aunque sea una tarea pequeña, si le dedicas 30 minutos todos los días, al cabo del tiempo te habrás dado cuenta de que habrás avanzado mucho.
Sin prisa pero sin pausa.
Cómo comentaba en el punto 2, lo ideal sería que las tareas repetitivas y sistemáticas, las delegases en otra persona que te pudiese echar una mano. Pero soy consciente de que a veces no es sencillo delegar. Sobre todo si recién estás empezando tu emprendimiento.
Al tener el tiempo tan limitado, es muy importante que las tareas que son repetitivas las sistematices y crees un proceso con ellas. Incluso para las tareas que no son tan repetitivas pero que siempre sigues los mismos pasos, es importante que definas bien los pasos que consideras para dar la tarea por finalizada.
Puedes utilizar un simple documento de texto en el que definas todos los pasos que tienes seguir para realizar cierta tarea. Te pongo un ejemplo: imagina que quieres escribir un artículo en tu blog. Los pasos para escribir este artículo podrían ser los siguientes:
En este caso, habrías definido de una manera clara 7 subtareas que tienes que realizar para escribir un artículo en tu blog. Sabrías perfectamente qué tarea va detrás de otra y te puedes centrar en el poco tiempo que tienes solo en una de esas acciones.
De esta manera siempre sabrás qué paso tienes que dar cada vez sin tener quebraderos de cabeza.
Hacer, lanzar y probar.
Esta ha de ser tu máxima.
Al ser limitado tu tiempo, más que nunca has de saber si las tareas que estás realizando darán sus frutos. Por ello, has de lanzar tus ideas y obtener lo más pronto posible resultados que te indiquen si vas por el buen camino o no.
No querrás dedicar tu poco tiempo en trabajar en algo que luego no te dé los resultados que esperabas, ¿verdad?
Eres una profesional increíble en tu trabajo por cuenta ajena.
Además estás comenzando a asentar las bases de tu propio proyecto digital.
Ambas cosas pueden hacer que al final del día te encuentres sin fuerzas e, incluso, llegar a quemarte si no lo combinas con tiempo para ti.
Tan importante son tus proyectos profesionales como el tiempo que te dedicas a ti misma.
Hay muchas manera de dedicarte todos los días un ratito a ti:
Sea de la forma que sea, todos los días tienes que bloquear tiempo en tu agenda para ti.
Además, mi recomendación es que efectivamente lo hagas así: que cojas tu agenda y establezcas un bloque de tiempo solo para ti. Porque reconócelo, si no lo tienes agendado, no lo haces.
Por ello, es importante que cuando hagas tu planificación semanal te des también un espacio a ti misma para descansar y hacer cosas que te ayuden a desconectar de tu día a día.
El tiempo que te dedicas a ti, no es tiempo perdido. Ni mucho menos.
El tiempo que te dedicas a ti es la mejor forma que tienes de recargar pilas y de no caer en el famoso burnout.
Emprender tu propio proyecto digital es algo que te ilusiona y tienes la sensación de que te podrías tirar horas enteras trabajando por y para él. Pero eso no es posible porque aún estás trabajando como empleada para otra empresa.
No obstante, ello no ha de ser un impedimento para comenzar tu propio proyecto a la par que trabajas por cuenta ajena.
Con mentalidad, disciplina y amor propio constantes, el comenzar tu propio proyecto online puede hacerse realidad.
Por ello, el adaptar la filosofía Kaizen a tus circunstancias actuales puede ayudarte a coger perspectiva del proyecto y, lo que es más importante, no abandonar en tu propósito de emprender online.
Ahora cuéntame, ¿compaginas tu proyecto emprendedor con trabajar por cuenta ajena? ¿estás aplicando alguno de estos tips?